Mutantes

Los “mutantes” para aquel torturador eran sus torturados, una especie de seres subhumanos que eran capaces de sacrificar sus vidas en beneficio de una vida mejor para las grandes mayorías. Por eso constituían un peligro para el sistema. ¿Y si los mutantes del presente, en realidad, fuéramos nosotros, las grandes mayorías?.

Opiniones18/06/2025 Mutantes
Mutantes

(APe).- -No sea cosa que se le queme el alma.
Esa fue la frase que eligió uno de los mayores torturadores de decenas de personas militantes revolucionarios de los años setenta para enrostrarle al periodista que investigaba por qué vejaban, mataban y robaban bebés durante el terrorismo de estado.
El trabajador de prensa siempre entendió los ideales de transformación de aquella generación pero también quería que hablaran los desaparecedores, no solamente los de las manos sucias de sangre si no también los de guante blanco, los titiriteros de los integrantes de las fuerzas de seguridad y las fuerzas armadas.
El torturador jugaba su perversión con la idea de disfrazar sus víctimas como si fueran los malos de la película y quería marcar las contradicciones de aquella dirigencia revolucionaria.
El periodista quería saber sobre el destino de los desaparecidos y también conocer el paradero de los bebés secuestrados o nacidos en cautiverio.
En esas charlas, atravesadas por el horror y los vómitos que le ocasionaban al cronista, el torturador, todavía libre en ese entonces de la primera década de la democracia recuperada, le dijo que sus víctimas eran “mutantes”.
La palabra le resonó porque hacía mención a quienes luchaban contra un héroe de la historieta argentina de fines de los años setenta y luego reeditado en los noventa, “Mark”, del fenomenal escritor paraguayo Robin Wood.
Wikipedia, tan insultada por los dueños de las empresas de la era digital por su contenido “colectivo”, dice que Mark “es una historieta argentina de acción postapocalíptica y ciencia ficción creada por el guionista Robin Wood y el dibujante Ricardo Villagrán y publicada por primera vez en el Anuario n.º 13 de la revista de Editorial Columba El Tony, en 1977. La historia está clara y confesamente inspirada en la película The Omega Man (1971) –la segunda adaptación cinematográfica de la novela Soy leyenda, de Richard Matheson- la historieta parte de una premisa similar a la del film pero se ve disparada hacia distintos rumbos y presenta personajes diferentes”.
El argumento es que “una nube de contaminación devastadora como producto de una compleja reacción de materiales radiactivos y bacteriológicos ha comenzado a arrasar la Tierra. Si bien Mark logra sobrevivir, comprueba que todas aquellas personas a las cuales la contaminación no mató, se han convertido ahora en horripilantes y deformes mutantes que se ocultan a la luz del día y buscan saciar su sed de sangre con los posibles humanos sobrevivientes.
“Esta nueva horda de mutantes poseen una rudimentaria alineación estratégica y no dudan en atacar a Mark apenas este comienza a transitar las calles desoladas. Sin embargo el joven ha sido entrenado en el combate con armas de fuego y posee un revólver que le heredara su padre con el cual abate a un par de mutantes apenas lo atacan. El joven sobrevive en las calles, crece y se hace más fuerte, se provee de más armas y adquiere recursos tácticos, encarnando una lucha sin cuartel por erradicar a la nueva estirpe de mutantes de la faz de la Tierra. Para ello ya desde el comienzo les advierte: 
“-¡Digan a todos que Mark ha llegado!”
Aquellos “mutantes”, para el torturador, eran semejantes a sus torturados, una especie de seres subhumanos o no humanos que eran capaces de sacrificar sus vidas particulares en beneficio de una vida mejor para las grandes mayorías. Pensaban y vivían diferentes y por eso constituían un peligro para el sistema. Eran mutantes y merecían ser torturados, asesinados y desparecidos.
Casi al borde de la tercera década del tercer milenio, es necesario pensar en aquel argumento de “Mark” o de la siempre reconocible y repetida historia de los “muertos vivos” que vuelven en series y películas varias.
¿Si los mutantes del presente, en realidad, fuéramos nosotros, las grandes mayorías?.
Es decir, ¿el ser humano sigue siendo un ser humano o ha devenido en otra cosa, en otro existente?.
Dice Byung Chul Han que “el ser humano del futuro, sin interés por las cosas, no será un trabajador (homo faber), sino un jugador (homo ludens). No necesitará vencer laboriosamente las resistencias de la realidad material mediante el trabajo. Los aparatos programados por él se encargarán de hacer ese trabajo…”.
“…El humano manualmente inactivo del futuro se acercará a ese Phono sapiens que toca con los dedos su smartphone. Usar el smartphone es una forma de jugar. Es tentadora la idea de que el humano del futuro solo juegue y disfrute, es decir, de que no tenga `preocupaciones´…”.
“…El Phono sapiens, que solo experimenta, disfruta y quiere jugar, se despide de esa libertad a que se refería Hannah Arendt, que está ligada a la actividad. Quien actúa rompe con lo que existe y pone en el mundo algo nuevo, algo completamente diferente. Para ello debe vencer la resistencia. El juego, en cambio, no interviene en la realidad. Actuar es el verbo de la historia. El humano jugador, manualmente inactivo del futuro representa el final de la historia…”.
Somos, entonces, mitad máquina y mitad seres sentipensantes. Somos Phono sapiens. Casi ciborg, casi robots, mutantes.
Quizás sea tiempo de la rebelión de los mutantes.
Recuperar la cabeza, soberanía de la cabeza, para reconquistar las otras soberanías.
Los Phono sapiens están lejos de la necesidad de construir una sociedad que en el trono de su vida cotidiana esté la noble igualdad. No la ven.
Y no recuerdan porque la memoria remite a lo colectivo, a sabernos parte de una lucha histórica.

Te puede interesar
La Cabeza donde pisan los pies

La cabeza donde pisan los pies

Por Carlos del Frade
Opiniones12/07/2025

Una década entera. Diez años desde aquella media maratón en Rosario en donde la vida se terminó imponiendo ante la muerte. Y entre medio terminar asumiendo como en aquel viejo principio taoísta que donde va la atención, va la energía. Para poner la cabeza donde pisan los pies.

Justicia y Paz

Justicia y paz

Por Alfredo Grande
Opiniones10/07/2025

Si la lucha son todas las luchas, hay una necesaria continuidad entre niñez, jubilados y pueblos originarios. La democracia fetiche necesita hacer negacionismo de todo origen. La cultura represora, el Gobierno de Ocupación, las derechas no toleran conocer ningún origen porque necesitan indultar los destinos. Por eso somos parte del nuevo malón de la justicia y de la paz.

mas poder

Más poder a la policía: camino al autoritarismo

Por Claudia Rafael
Opiniones08/07/2025

Un decreto habilita a la Policía Federal a requisas y detenciones sin permiso judicial y ante la sola presunción de un delito. En los mismos días los efectivos de esa fuerza recibieron un aumento salarial y se les otorgaron casas del plan Procrear ya adjudicadas. Crecen las normativas represivas en tiempos de incremento de la protesta.

Una sociedad en armas

Una sociedad en armas

Por Silvana Melo
Opiniones05/07/2025

El gobierno liberó la tenencia de armas semiautomáticas. Sólo las usan las fuerzas de seguridad. ¿Para qué necesita una sociedad con violencias emergentes armas costosas y con alto nivel de daño? ¿Para qué armas que deberían estar en cuarteles y destacamentos mudan a las casas? Sin dudas alimentarán a los monstruos. Engordarán a las violencias crecientes.

Futbol

Integrar en lugar de expulsar para que el partido lo gane la comunidad

Miguel Peiretti
Opiniones04/07/2025

El deporte es una herramienta efectiva en la prevención de adicciones al fomentar hábitos saludables. Significa un ámbito de contención cuando el espacio que se ofrece es seguro para el mejoramiento del bienestar emocional para la construcción de relaciones positivas. Para que esto ocurra es necesario que se instrumenten políticas públicas para que los campos de juego no se transformen en un ring

ciberpatrullaje

Ciberpatrullaje: colonialismo de datos

Por Martina Kaniuka
Opiniones03/07/2025

Patricia Bullrich anunció, en un contexto de aumento de la conflictividad social, la creación de un nuevo bureau de las fuerzas de seguridad -con la tecnología y los métodos del FBI y la eficiencia y la pericia locales. El objetivo: controlar la organización que viene creciendo por debajo, ahora desde las redes sociales.

Lo más visto
La Cabeza donde pisan los pies

La cabeza donde pisan los pies

Por Carlos del Frade
Opiniones12/07/2025

Una década entera. Diez años desde aquella media maratón en Rosario en donde la vida se terminó imponiendo ante la muerte. Y entre medio terminar asumiendo como en aquel viejo principio taoísta que donde va la atención, va la energía. Para poner la cabeza donde pisan los pies.

Suscríbete gratis al Boletín Informativo para recibir periódicamente las novedades