El mercantilismo hace que se finja creer en lo mágico

Dejénme confesarles algo. Me obsesiona, y me fascina, la Navidad. Es la única época del año en la que el mundo —al menos, una parte de él, y una cada vez mayor: la aldea global se abre camino, y la mente única del capitalismo feroz borra todo aquello que no resulte fácilmente mercantilizable, oh,

Sociedad24/12/2024 Por Laura Fernandez
mercantilismo

Díganme, ¿acaso hay algo que pueda competir con el omnipresente gorro de Papá Noel? ¿O era Santa Claus?— finge creer. ¿En qué? En eso que de forma brutalista, o reduccionista, o, por qué no, simplemente ridícula, llamamos la magia. Pero, ¿qué es la magia? Un relato que cubre a otro —al único otro posible: el de lo real—, y lo suspende, por un momento. Oh, sí, la realidad es una convención, y lo sabemos. Es una convención segura y reconocible, aunque cada vez más intervenida, cada vez más pura interferencia, cada vez más fábrica de mundos burbuja paralelos.
Dejénme confesarles algo más. Ni siquiera hice la comunión, así que jamás supe de dónde venía todo esto. Simplemente, ocurría. Se abría una brecha y un tipo muy concreto de ficción pretendía pasar por realidad. Que mi obsesión, como escritora, sea precisamente esa brecha, es decir, todo aquello que el ser humano, como animal narrativo, como especie escritora, inventa para no tanto dar sentido al sin sentido —¿Por qué tenemos que acabarnos? ¿Qué somos exactamente? ¿Qué hacemos en un planeta en mitad del espacio, dando vueltas a toda velocidad?—, como promoverlo, apuntalarlo, permitirle recordar que, si hemos sido posibles, si lo estamos siendo, todo podría serlo, probablemente tenga que ver con que siempre fui consciente del truco, nunca, en realidad, pude creer, por más que los mismísismos Reyes Magos visitaran una noche mi casa.
Debía de tener cinco años, y era muy consciente —la torpeza de los adultos es enternecedora, descuidadamente cruel. Mis padres, preocupados, contrataron a unos chicos que se dedicaban a ir por el barrio entregando regalos la Noche de Reyes, vestidos de Gaspar, Melchor y Baltasar. No mejoró. Pero fingí que lo hacía. Me pareció divertido. ¿De veras estaba jugando el mundo a ser de mentira? ¿Todo el mundo, a la vez? ¿Por qué?
Intenten pensar por qué estos días les parece que el tiempo pasa de otra forma, que las luces brillan más, o que abandonan a una tristeza más honda, o se pierden en el deseo —también, y sobre todo, material— más desaforado. Hay un barniz. Lo que existe está siendo distorsionado, ritualmente.  - «Es esa época del año, en la que el mundo se enamora» canta Frank Sinatra en el clásico The Christmas Waltz —, y ¿no dirían que está en lo cierto? Todo es excesivo —y cada vez más— en Navidad, y lo es porque, de alguna forma, puede serlo. Estamos perdiendo la cabeza porque no podemos no hacerlo. En un mundo tan cada vez más decididamente falto de ilusión —tan precaria, o secamente real—, que esa brecha exista, y siga abriéndose, año tras año, es un milagro.
Sí, la Navidad es cada vez más una versión enloquecida de sí misma. Pero lo es, porque el mundo también. No porque esté mal. Piénsenlo. No se trata de cuánto compramos, o comemos, sino de detenerse, por un momento, a contemplar algo que no existe, pero hemos creado entre todos. No importa cómo de despojado está hoy de significado, de hecho, cuánto más lo esté, mejor, su único sentido debe ser el de la irrealidad, porque de lo que se trata es de creer en cualquier cosa que nos aleje de la realidad durante un tiempo, y fingir que todo está siendo distinto, y tomar, por qué no, conciencia de nuestro poder para alterar el orden, cualquier orden. Dejemos que lo que hemos inventado nos proteja unos días, y no nos preguntemos por qué lo hace. Siempre vamos a necesitar creer que nada tiene por qué acabarse nunca.

Te puede interesar
discapacidad

Foro Permanente Discapacidad denuncia aumentos engañosos

Redacción Regionalisimo
Sociedad30/10/2025

Mediante un comunicado el Foro Permanente Discapacidad insiste en la necesidad de que se cumpla plenamente la Ley de Emergencia en Discapacidad. Solo así se estará cumpliendo con las palabras del propio Presidente: “Dentro de la ley, todo; fuera de ella, nada.”

Lo más visto
Libros

Charla y presentación de dos obras sobre los orígenes del noreste cordobés en la Biblioteca de Morteros

Redacción Regionalisimo
Locales16/11/2025

La presentación de los libros «Tras las Huellas Originarias del Noreste Cordobés» y «Improntas Ancestrales, herederos de historias», Construyendo el futuro, dos obras de Ebe María Baima Cerri y la Red de Archivos Históricos del Noreste Cordobés, organizado por la Biblioteca Popular «Cultura y Progreso» de Morteros se lleva a cabo el jueves 20 de noviembre a las 20,30

Pibas rehenes de un modelo de esclavitud

Pibas rehenes de un modelo de esclavitud

Por Claudia Rafael
Opiniones16/11/2025

Son las víctimas de nuevas formas de esclavitud. Pibas captadas a través de ofertas seductoras en redes digitales, a través de influencers o con propuestas de ganancias inalcanzables. Un modelo que no hace más que exhibir oropeles y pompas en vitrinas inalcanzables que deslumbran. Pero que les quedarán siempre lejanos.

Boscarol

Reconocieron a Hugo Boscarol

Redacción Regionalisimo
16/11/2025

Reconocieron el apoyo brindado al teatro por el intendente Hugo Boscarol, quien en diciembre finaliza su mandato.

Suscríbete gratis al Boletín Informativo para recibir periódicamente las novedades