Libro: "La única historia"

Acercándonos a la lectura Por Mirta Barale
Barnes es un reconocidísimo escritor inglés de esta época. Sus novelas son profundamente humanas, como esta interesante historia de amor, aunque dolorosa y triste. Se dice que tiene elementos autobiográficos.
Paul, joven inglés universitario, de 19 años, frecuenta el club de tenis de su vecindario, barrio de clase media bastante acomodada y pacata como toda Londres, a mediados de la década del 60. Bien de su época, lleva el pelo largo, admira la cultura hippie y el amor libre. En un campeonato interno por parejas del club, se sortean los concursantes y a él le toca con Susan Macleod, casada, 48 años, dos hijas universitarias y un marido bebedor con el que ya duermen en camas separadas desde hace más de 20 años. Es una relación totalmente rota que sólo mantiene las apariencias.
Paul y Susan se enamoran perdidamente, mantienen una abierta y escandalosa relación que hace que los expulsen del club. Desafiando todos los códigos sociales, se van a vivir juntos a otra casa, en otro lugar de Londres. Permanece con ella entre 10 y 12 años, mientras estudia, se recibe de abogado y trabaja. Ella, debido a una adicción, comienza a deteriorarse física y sicológicamente, él la sigue amando con pasión, la acompaña y la protege hasta que todo se acaba.
Junto con la narración de los hechos, en donde los diálogos son muy significativos, el narrador, en primera persona, es hondamente reflexivo, después de 50 años de haber vivido esta historia que lo marcó irremediablemente para siempre. El amor en todas sus formas, sus pros y sus contras, sus alegrías y tristezas, sus consecuencias ya sean dolorosas o felices, es uno de sus temas preferidos. También, la sociedad, la juventud y la ancianidad, la violencia doméstica, el alcoholismo, las enfermedades, la amistad, la frustración de las personas, relación padres hijos, y más, todo tratado con profunda e inteligente lucidez.
El texto se divide en tres partes. El cambio de persona gramatical, va marcando las etapas y los cambios de la relación. En primera persona del singular cuando todo era maravilloso; aparece la primera persona del plural, un plural inclusivo, porque involucra al lector, que luego cambia por la segunda persona, con el mismo fin, el de hacerlo partícipe al lector de sus dolorosas renuncias y desencantos. En la tercera y última parte, adopta la tercera persona; han pasado más de 50 años, ya todo ha quedado atrás, pero sus recuerdos son muy vívidos, por lo que debe contar esa historia, porque, para él, es «La única historia».
Muy buena lectura.