El sostenimiento de las mismas recetas permiten que las balaceras comiencen a ser parte de la cotidianidad en Morteros

Morteros desde hace dos años viene sufriendo el accionar de los tira tiros, pero para resolver el problema se sigue aplicando la misma receta que viene permitiendo impunidad.

Locales 12/04/2023 Miguel Peiretti Miguel Peiretti
balacera

Ante la impunidad de la que gozan las balaceras que no llegan a ser un homicidio pero si tienen el propósito de amenazar o extorsionar, es un problema que empieza atravesar la cotidianidad de los morterenses, lo que hace  necesario que nos preguntemos: ¿Tiene la suficiente capacidad el comisario de Morteros para conducir el esclarecimiento de estos hechos o el traje le queda demasiado grande? ¿Cuál es la causa por la que se deja que todo transcurra desde el poder político? ¿Cuál es la razón que la sala de monitoreo no logra observar para prevenir? ¿Qué sentido tiene la millonaria inversión en empresas privadas de seguridad? ¿O será que se utilizan recetas que no sirven para nada?
La semana pasada Cristian Serrano cuando se encontraba en su domicilio de Ituzaingó y Olmos de barrio Malvinas de Morteros, llegaron tres personas que le provocaron una herida de bala en el glúteo izquierdo, para luego darse a la fuga. Los sicarios dejaron abandonada a pocas cuadras entre pastizales una moto Rouser 200 negra, que tiene pedido de secuestro de la Fiscalía N° 5 de Santa Fe con sede en Rafaela desde el 8 de marzo.
En los últimos dos años son unos 16 hechos violentos vinculados a balaceras y ataques con armas blanca desplegado en distintos sectores de la ciudad, en uno de ellos con el incendio de una vivienda y el homicidio de José Luis Cáceres el año pasado. Solo fue esclarecido el homicidio y otro hecho de bala, el resto goza de una excelente salud, ya que tanto la fiscalía como la policía nada lograron, más allá de montar algún que otro allanamiento.

Una bala puede llegar a cualquiera 

El nivel de inseguridad provocado por el negocio que se desenvuelve desde el narcotráfico viene buscando ser incorporado como parte de la vida de los morterenses que va siendo aceptado por la misma sociedad, sirviendo a determinados círculos sociales, pero una bala no se le niega a nadie y puede llegar a cualquiera, por eso es necesario que se termine, para que las necrológicas no sean ocupadas por jóvenes vidas y muchos tengan que pensar en irse a vivir a otra ciudad en busca de tranquilidad, como ocurre en otros lugares que se actuó de la misma manera que se lo hace por acá.
Un tirador puede ser cualquiera que quiera y necesite hacerse de unas monedas, por eso es importante no solo descubrir al tira tiro que siempre es reemplazable, sino escalar a quienes dan las órdenes y a quienes financian, pero para eso es necesario contar con equipos en la fiscalía y la policía con profundo conocimiento investigativo para descubrir los densos trasfondos y sus ramificaciones a los fines que permita su erradicación.
Pero más importante es prevenir que los hechos ocurran, función primordial de la policía, en la que los últimos tiempos viene haciendo agua por todos lados porque no solo no evita las balaceras, sino que tampoco previene los hechos contra la propiedad que vienen en permanente aumento.
La violencia que se está impregnando de manera inusitada busca lograr liderazgo en el mercado de las drogas en algunos casos y otros se trata de ajustes de cuentas por deudas económicas, algo que se puede evitar solo haciendo un poco de inteligencia. La falta de capacidad para la realización de inteligencia criminal es lo que permite que la delincuencia y la narco criminalidad se mueva sin dificultades para cumplir con sus objetivos.
La circulación de armas de fuego, tampoco es investigada, menos aún el manejo del mercado y la procedencia de las mismas, lo que hace que se está gestando no solo en Morteros, un mercado, como ocurre en ciudades vecinas desde hace muchos años, pero pareciera que quienes tienen la responsabilidad de la prevención, nunca se enteran de esos movimientos.
Los que manejan la otra parte que nutre el negocio que es el ciclo del dinero que alimenta el mercado ilegal de armas, tampoco es investigado, son quienes tienen la capacidad de comprar voluntades para proveer impunidad y sostener el negocio de quienes se dedican al financiamiento de las drogas. Estos no operan en los barrios, lo hacen en el centro a plena luz del día.

Maquillaje político

Más preocupante aún es, quienes tienen la responsabilidad política de abordar esta problemática, en este caso las autoridades municipales que solo se limitan a maquillar la situación aplicando la misma receta que viene fracasando consecutivamente, obteniendo como resultado el aumento de la inseguridad en la ciudad.
Ante cada situación alimentan el gran negocio de unos pocos con la contratación de empresas de seguridad ciudadana, incorporación de cámaras, sala de monitoreo, además de las fuertes inversiones que realizan en la parte operativa y logística con negativos resultados para la sociedad que debe soportar cada vez más hechos contra la propiedad y en los dos últimos años, el temor ante el riesgo de recibir alguna de las balas que pululan en distintos barrios.
Por otra parte solicitan a Gendarmería Nacional que vengan a controlar las motos a trabajadoras y trabajadores, mientras los sicarios se mueven con absoluta libertad por las calles de la ciudad y kilos de droga son distribuidos frente a las narices de cada una de las fuerzas que nada logran descubrir, con la excepción de la FPA que encuentra unos escasos gramos por año.
Las elecciones internas de Juntos por el Cambio lo tienen al intendente ocupado y preocupado por ganar la misma, pero es evidente que no dedica la misma energía para resolver el poder lesivo de quienes van sembrando este horror en las calles de Morteros, el que se fue acrecentado desde su llegada al municipio.
Ante el panorama que se vive no aparecieron hasta el momento por parte de los cuatro candidatos a la intendencia programas que permitan visualizar para los tiempos venideros una ciudad segura. La propuesta de palos sobre palos, está demostrado que solo significa defender el negocio de los mercaderes de la muerte, cuando se debe trabajar para su eliminación.
Morteros es una ciudad tranquila, de trabajo, la mayoría de gente es honesta. El riesgo de muerte de cualquier persona debería indignarnos, pero no sucede. No nos debemos dejar amedrentar, es necesario dar batalla organizándonos comunitariamente para peticionar ante las autoridades actuales y las que vendrán para la instrumentación de políticas concretas para que las video cámaras y seguridad ciudadana sean giradas hacia los financistas y a quienes manejan los negocios que en el entorno se generan desde la comercialización de drogas, las armas, la evasión, el lavado de dinero por una parte y por la otra la puesta en marcha de programas para que las pibas y pibes no sean fagocitados por el sistema desde la contención, la educación, la cultura, el deporte y el trabajo. 
Es más importante edificar una niñez, adolescencia y juventud sana que invertir en grandes obras, para evitar la profundización de la inseguridad para los años venideros.

Te puede interesar
Lo más visto

Suscríbete gratis al Boletín Informativo para recibir periódicamente las novedades

Convocatoria1

Convocatoria2